La desertificación es la degradación de las tierras áridas, semiáridas y subhúmedas secas debida a diversos factores como las variaciones climáticas y las actividades humanas.
Para hacer frente a esta problemática, Argentina suscribió en 1994 y ratificó en 1996 la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (UNCCD por sus siglas en inglés), una herramienta normativa Internacional para prevenir, combatir y revertir los graves procesos de desertificación que sufre nuestro país. La Convención, conformada por 194 países, aplica un enfoque integrado que fomenta la participación de la sociedad civil y la transferencia de la ciencia y la tecnología para asegurar la acción global para combatir este flagelo.